1. Prepara el espacio
Lo primero de todo, hay que asegurarse de que el espacio donde irá nuestro invernadero está libre de todo aquello que pueda ser un obstáculo o pueda dificultar la colocación del plástico: ramas, escombros, palos… El terreno debe estar bien plantado para poder colocar los postes a la misma altura y que el plástico quede bien ajustado y estable.
2. Revisa la estructura
¡Ojo con la estructura del invernadero! Ten cuidado con los hierros de la estructura porque pueden tener salientes que generen roturas en el plástico. Una manera de evitarlo es forrando esos salientes. Igualmente, la estructura debe estar toda a la misma altura para que el plástico quede uniforme y se ajuste a la perfección.
3. Elige el plástico de invernadero adecuado
Podemos encontrar muchos tipos de plásticos de invernadero, ¿cómo elegir el más adecuado para ti? A la hora de comprar el plástico de tu invernadero deberás tener en cuenta el tamaño y el tipo de plástico.
Ahora que ya conoces estas sencillas recomendaciones previas, te explicamos cómo poner el plástico en un invernadero.